Después de que el mismísimo Conan te salvase la vida al liberarte de la cruz, tienes que aprender cuanto antes a sobrevivir. Soporta las tormentas de arena, protégete de las intensas temperaturas y caza animales para conseguir comida y recursos. Explora un mundo inmenso y fluido, desde los abrasadores desiertos del sur hasta las montañas nevadas del norte.